No los botes más: hierve las cáscaras de huevo y dile adiós a muchas dolencias
Muchas veces tiramos a la basura elementos de la cocina que, sin saberlo, poseen propiedades medicinales y nutricionales sorprendentes. Uno de esos tesoros olvidados son las cáscaras de huevo. Aunque normalmente se descartan tras utilizar el contenido, estas cáscaras son ricas en calcio, minerales traza y otros compuestos beneficiosos para la salud de huesos, dientes, uñas e incluso para aliviar dolores articulares. Aprovecharlas puede ser más sencillo de lo que imaginas, y lo mejor es que no necesitas productos costosos ni tratamientos complicados.
Las cáscaras de huevo están compuestas en un 95 % de carbonato de calcio, un tipo de calcio fácilmente absorbible por el cuerpo humano. También contienen pequeñas cantidades de magnesio, fósforo, zinc y otros minerales esenciales. Consumidas de manera adecuada, pueden fortalecer la estructura ósea, prevenir la osteoporosis, mejorar la salud de la piel y uñas, e incluso ayudar en procesos de desintoxicación del organismo.
Receta: Té de cáscara de huevo
Ingredientes:
Cáscaras limpias de 4 a 6 huevos (orgánicos preferiblemente)
1 litro de agua
Miel o limón (opcional, para dar sabor)
Preparación:
Lava muy bien las cáscaras de huevo, retirando los restos de clara o yema.
Hiérvelas en el litro de agua durante 10 a 15 minutos.
Deja reposar el agua hasta que se enfríe.
Cuela y guarda en una botella de vidrio en el refrigerador.
Uso adecuado:
Consume medio vaso de esta infusión en ayunas o entre comidas, 2 a 3 veces por semana. Puedes agregarle unas gotas de limón o una cucharadita de miel si deseas mejorar su sabor.
Precauciones:
Es importante asegurarse de que las cáscaras estén bien lavadas y hervidas para eliminar cualquier posible bacteria, como la salmonela. No se recomienda su consumo diario en exceso, ya que el cuerpo solo puede absorber cierta cantidad de calcio.
En resumen, las cáscaras de huevo no son basura, sino una fuente poderosa de salud natural. Con esta simple receta puedes aportar un refuerzo mineral a tu cuerpo, mejorar la salud ósea y decir adiós a molestias comunes como los dolores articulares. ¡La próxima vez que cocines huevos, recuerda guardar sus cáscaras!